Un atardecer alucinado nace,
El fuego vivo que emana de una constelación nueva,
Un sol que se despierta para llorar rayos de luz,
Una luna se enciende cuando la oscuridad conquista el gigantesco cielo.
Y junto a una imagen entre mis dedos despierto,
Miro pero no veo (aunque parezca una secuencia ilógica).
La inmensidad de un silencio tan ruidoso para mi corazón
Y la soledad de mi alma me persiguen, sin dejarme ir.
Sueño, vivo, imagino,
Despierto, ensueño, muero,
Renazco, vuelvo a sentir,
Triste, feliz, mis latidos vuelven a mí.
El encargado de alumbrarme tropieza,
Así, pasa la culminación de un nuevo día,
El ansiado regreso tarda y el encuentro no llega,
Espera mi ser escucharte otra vez.
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